Sé que tengo problemas de ira,
sé que abriría vuestros cráneos
como nueces si me lo pidierais,
solo si me lo pidierais.
No necesito que nadie me entienda,
ahora mismo, necesito volcar mis frustraciones
sobre alguien y arruinar su vida,
simplemente. Y olvido las palabras
pero no importa porque también
olvidé lo que quería decir,
y cómo me siento, y todo lo demás.
Tus tetas son enormes
pero no me vuelvas a llamar.
Mi falo en tu boca,
qué rico mamá.
Pero no vuelvas,
no vuelvas a llamar.
Soy frío como el hielo
y si me derrites inundo tu pensamiento.
Soy frío como hielo
pero no como el acero,
porque no soy flexible.
Una frase final para culminar el gozo
y el deseo humano, imposible de encontrar,
creo que voy a drogarme un poco más,
hoy me lo merezco.