No podría vivir en un mundo en el cual el suicidio no existiera, sin la opción de tomar como posibilidad quitarme la vida me moriría de desesperación. -Dijo.
Miró hacia abajo y vio su sangre, recogió su brazo caido y pensó con cierto aire de tristeza: ya nunca tocaré la guitarra de nuevo...
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