Por toda la pena del mundo Cristo te llora, por toda la pena del mundo Cristo no se entera de una mierda. No me importas, ni mi propio destino, pero no digas nada, ni siquiera sé porqué insisto. Y pienso, puedes, joder, verme esta noche, tú tan solo ven que hay algo que no puedo contener.
Por toda la belleza Cristo no piensa en tu mierda, anoche hizo una noche linda, llena de cal y humedad, anoche florecieron de mi pecho flores marchitas. Por toda la belleza, ¿cómo es así? Por toda tu mierda. Otra noche, otra, otra, otra, otra, otra, otra.
