Afuera El Sol brilla como loco, es increíble porque ya es muy tarde. Los niños gritan como hienas y los adultos toman cerveza en la terraza del bar. Dulzura es la palabra, yo estoy aquí encerrado y no quiero salir o no puedo salir. Y mis manos me dan de fumar porque todavía es de día y en ocasiones se siente como si aún hubiese esperanzas, todavía suena el timbre y me envían una señal para salvar el mundo. La droga activa el miedo, la sensación de descontrol es relativamente aparente, tengo ganas de salir pero me quedo adentro. Tampoco comparto nada, soy un sumidero que todo lo traga.
Y me aburro de mí mismo o me cuesta tener la mente libre mientras estoy solo, y antes me encantaba pero ahora me aterra. Las personas son boletos de lotería y algunas te dan fortuna y otras ruina, cuál ser es una decisión.
La pierna que me duele, la mandíbula que cruje y una voz que dice que salte salte salte, otra que me quede que me quede. Permanece a salvo mientras puedas, una flor de invernadero no es tan feliz pero vive más tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario