martes, 17 de junio de 2014

I hate myself & I want to die.

Por la mañana arcadas y ardores, los mocos de mi garganta entran en mi estómago como polizones colándote a través del cardias. Me quema por dentro. Me pregunto si hay algo en mi vida que siga mereciendo la pena, y madre dice que no hay nada que no se pueda arreglar, ¿pero acaso estoy estropeado? No hay nada que haya que solucionar en mí, simplemente giro en sentido contrario al del resto del mundo. Nací así, lo recuerdo desde mi más tierna infancia, ese sentimiento de exclusión, de ser simplemente distinto y no comprender hasta ahora en qué y por qué. ¿Es una bendición o un castigo?

No hay comentarios:

Publicar un comentario