jueves, 7 de agosto de 2014

And four years have gone by.

"Buen intento, no podrás escapar, pero buen intento. A través de los baches y las penurias, tú avanzas impasible porque, ¿qué otra queda? ¿Para qué hablar acerca de lo que ya está muerto?, ¿para qué persistir en indagar la herida, si la sangre derramada jamás volverá a regar la tela interior de mis órganos? Ojalá todo ésto hubiera acabado bien. Los extremos se tocan, y por eso la más contundente felicidad genera en otro lugar tristeza. ¿Qué quieres que haga? ¿Qué quiero que hagas?, no leer estas líneas fermentando odio y creyendo que yo hago lo mismo, no es así. Es una verdadera pena que este fiel salvoconducto que es enseñar a una pequeña parte del mundo mis sentimientos provoque rabia en tu desvalijado corazón que luce en su interior muebles de atrezo; pero no puedes pedirle a un guerrero que no sangre, a un revolucionario que no sueñe, ni a un poeta que no escriba".

¿Y es que acaso no tengo el derecho a decir lo que siento (tal vez sea tu yo quien te obliga a prestarme atención) y a manifestar mi esquizofrenia de la manera humana más patética posible? Escribo todo lo que ves, pero a la vez hay tantas cosas que te dejas en el tintero. Creo que el dolor está dando paso a la locura. Otra noche sin dormir, caray, pura distimia, pero sabes, tiene un sabor agridulce que me encanta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario