lunes, 22 de enero de 2018

Voy a hacer cosas

Todo esto forma parte del plan de Dios, si estoy aquí sentado sin pensar demasiado y esforzándome por sentir, debe querer decir algo. Una lágrima paga todo los platos rotos, una lágrima cae al suelo virgen e insemina el vacío, de él brotan plantas exóticas y flores hermosas y yo me reduzco a tamaño molecular y creo mi pequeño mundo frágil y débil como cualquier otro. Detrás de la cortina de humo, lejos de todo pensamiento se esconde una respuesta. Realmente me asusta entregarme a alguien quien quiera que sea ese bastardo cabrón. Me asusta la gente y el miedo crea una coraza rígida pero blanda, y a eso que los demás también hacen lo llaman coraje o fuerza y no es más que pánico.

Si agarrara herramientas y con un cúter oxidado y sucio y abriera mi piel, si con las orejas de un martillo haciendo palanca abriera mis costillas y me mostrara a todos como soy, y si con un cortador de pizza hiciera un tajo en mi cráneo y abriera la bóveda y diseccionara mi cerebro, cuántas luces podría ver. Si con un sacabolas de helado extrajera mis globos oculares jugaría a las canicas con ellos para ver el mundo distinto, los dejaría en una esquina de la calle toda la noche para ver lo que no se suele ver y me dejaría llevar por otros sentidos.

Esta noche voy a conocerme, voy a permitirme ser un poco gilipollas, un poco más. Voy a derretir la luz de las estrellas y voy a darte un nombre bonito, voy a introducir mi mano a través de mi garganta y voy a arrancar ese dolor del fondo de mi estómago. Lo voy a sostener en mis manos y voy a soplar para enfriarlo, y por mucho que queme y me duela por mis santos cojones que no voy a soltarlo hasta que logre comprenderlo y pueda reírme de él. Voy a escribir un libro de mil poemas resumidos todos en uno y va a ser tan bonito que alguien va a tener que encargarse de amarme y de cazar todas las bellas mariposas que surjan de él. Y voy a permanecer tumbado toda la noche bajo el arcoíris que construya y nada va hacerme sucumbir, y voy a fumar con el viento y voy a rezar un poco para dar las gracias por las cosas buenas que tengo y por esta perra obstinación que es la llave maestra de todas las puertas que encuentro.

The Taxpayers - I Love You Like An Alcoholic (One Last Kiss. I Need You Like I Need A Broken Leg)

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